Durante un tiempo este fue un tema controvertido, ya que se cruzaban diferentes opiniones al respecto, pero a día de hoy la ciencia es clara: EL REPOSO NO AFECTA A LOS RESULTADOS.

Esto quiere decir que a no ser que por una situación específica en la que el especialista recomiende lo contrario, el paciente debe seguir con su día a día.

Hoy aclaramos algunas cosas al respecto y te damos truquis que esperamos te vengan súper bien.

En una charla que ofrecí en Quiron La Floresta Zaragoza, el doctor Carlos de Bonrostro (muy top) me dijo: “Mira Marian, mientras el profesional no indique lo contrario lo recomendable tanto física como emocionalmente es que el paciente intente seguir con su ritmo de vida habitual.  Incluso una andada suave beneficia el bamboleo que el útero percibiría en un ciclo natural.”

¿Qué quiere decir esto?  Obviamente en nuestra psique todo cuidado es poco (porque sabemos que ahí dentro viaja alguien)  y nos da la sensación que al toser o hacer un esfuerzo nuestro pequeño se va a “escurrir” o salir disparado… ¿Os suena esa sensación?

No obstante, tras la transferencia, nuestro embrioncito no sabe cómo ha llegado ahí y él actuará tal cual está programado para implantarse, no sin enfrentarse a nuevos retos que de manera natural también tendría por delante.

Ahora, si me preguntas: “Marian, mi trabajo es muy estresante, es que no me veo ahí después de la transfer y mucho menos pasando la betaespera, ¿Qué hago?” respondo que: “Es algo MUY PERSONAL y sólo tú puedes decidirlo, pero si consideras que esos días vas a estar en otro planeta y puedes permitirte estar de baja hasta conocer la BETA, pues ole tú y tu trabajo.”

Explícale a tu médico de cabecera la situación, con toda probabilidad entenderá tus circunstancias y te proporcionará un parte de baja temporal (Ojo, no todos son igual de comprensivos y majetes y aunque deberían serlo siempre nos llevamos sorpresas.)

Necesario no es.  Si tú estás acostumbrada a ir al gimnasio no tendrías por qué no ir (aunque a mí personalmente me parece que por unos cuantos días que te lo saltes no va a pasar nada), anda a diario un ratito (no te hagas el Camino de Santiago que nos conocemos), sal y despéjate y luego quédate en casa atiborrándote de series de Netflix y dejándote mimar por ti misma o por quien sea.

Lo que si que es cierto que tumbada en el sofá con los ojos clavados en el techo esta espera se te va a hacer eterna.

A continuación os dejamos algunas recomendaciones para que estos quince días de BETAESPERA no sean tan largos y estresantes.

Y por cierto… lo del Aquarius… es un mito.  Pero si te gusta el Aquarius, dale al Aquarius.